Por el Arquitecto,, William Reyna
Los dominicanos y dominicanas tenemos la problemática que tenemos mala memoria, aquí coincido plenamente con el Lic. Marino Zapete Corniel, como lo refiere su libro " Jarabe Para la Memoria" escrito precisamente por eso, por que el temía que los dominicanos volviéramos de nuevo a pensar en este desorden administrativo en que cayo la República Dominicana en el gobierno del agronomo perla antillana Hipolito Mejía ayer " PPH" hoy llego Papa , las obscenidades administrativas se cometían a montón por el grupera de malandrines y comediantes que nos gobernaron en ese entonces.En medio de todos los ruidos provocados por el estilo " Atípico" del presidente Mejía, junto al dispendio del gasto publico los endeudamientos aventureros y la corrupción administrativa, las obscenidades que se cometían a diario los endeudamientos aventureros y la rampante corrupción, el gobierno se desempeñaba en un verdadero " Manicomio" administrativo, expresión con la cual califico Manuel A. Fermin, columnista del periódico Hoy, el desorden imperante en la administración del Estado dominicano, en un articulo donde enfocaba la pobre gerencia del equipo económico del gobierno y el propio presidente. * periódico Hoy del 11 de Enero del 2003.En efecto, así ocurría. La improvisación, la ineptitud, la incapacidad, la brutalidad, la falta de experiencia en los asuntos del Estado muy pronto tuvieron como resultado un sin numero de fallos y errores, tales como redacción inadecuada de decretos, la adopción de medidas impopulares que luego tenían que revocarse y la elaboración de leyes sin la debida ponderación, que luego tenían que ser modificadas, entre otros asuntos.Una de esas primeras medidas disparatadas lo fue el DECRETO NO. 820, del 25 de septiembre del 2000, donde el jumento de gurabo, ordenaba atrasar una hora el reloj. Un mes después se emitió otro decreto, esta vez para que se le adelantara una hora, y finalmente otro decreto para dejar las medidas sin efecto y volver a la hora original ( se gobierna un estado de esa manera, con ese desorden descomunal) Antes de de derogarse la medida, y debido a la confusión causada y los perjuicios que ocasiono a la población, sobre todo a los trabajadores y los estudiantes, el Poder Ejecutivo, como si se tratara de un asunto de gran envergadura, designo una comisión de alto nivel integrada por la vicepresidente de la República, el consultor jurídico de la presidencia, el secretario de Estado de Trabajo y el secretario de Turismo para que determinaran que hacer. La comisión recomendó que la dejaran sin efecto, pero a partir de ahí los chistes de la gente del pueblo acerca de la incapacidad evidente del ciudadano que habían escogido como gobernante, no tuvieron limites, así quieren volver muchos dominicanos y dominicanas que no tienen un ápice de sustancia gris por no decir cerebro a que este senor y taimado caimán vuelva a gobernarnos, como masas borreguiles que somos.Mientras estas tonterías y disparatadas sucedían las " Bases del Partido" se abalanzaron sobre la administración publica, como cabras monteras al desfiladero, Todo demandaban un empleo, sin importar el nivel cultura, ni siquiera su nivel académico, sacaban a los empleados públicos de las oficinas del estado dominicano, es decir de volver a tener este gobierno, que se preparen los empleados públicos que es pa fuera que van....En poco tiempo los logros mostrado del gobierno anterior de adecentar y hacer mas eficiente y moderna la administración publica se fueron a pique, restableciéndose la " " ARRABALIZACION" y la incapacidad, las obscenidades administrativas en las oficinas publicas funcionando siempre una mafia afuera, para diligenciar cualquier diligencia ciudadana. 
El presidente Hipolito Mejía, arrastrado por la aberración de su clientelismo y un populismo crónicos, permitió que se " CUALQUIERIZARA" en poco tiempo todo el tren administrativo del estado, y no se salvo ni el propio Palacio Nacional, el cual saquearon a mansalva y despiadada mente, al entregarlo al presidente Fernandez, pues la falta de criterios para escoger a los servidores públicos hubo de todo, chusmas, burros, burrajos, burralengos, jumentos, jumentas, borricos, borricas y alcaldes pedáneos, rufianes, malandrines....
Tomado la mayor parte del libro" ATÍPICO" del Lic. Ramon Puello Baezpagina 105 y 106....
Los dominicanos y dominicanas tenemos la problemática que tenemos mala memoria, aquí coincido plenamente con el Lic. Marino Zapete Corniel, como lo refiere su libro " Jarabe Para la Memoria" escrito precisamente por eso, por que el temía que los dominicanos volviéramos de nuevo a pensar en este desorden administrativo en que cayo la República Dominicana en el gobierno del agronomo perla antillana Hipolito Mejía ayer " PPH" hoy llego Papa , las obscenidades administrativas se cometían a montón por el grupera de malandrines y comediantes que nos gobernaron en ese entonces.
En medio de todos los ruidos provocados por el estilo " Atípico" del presidente Mejía, junto al dispendio del gasto publico los endeudamientos aventureros y la corrupción administrativa, las obscenidades que se cometían a diario los endeudamientos aventureros y la rampante corrupción, el gobierno se desempeñaba en un verdadero " Manicomio" administrativo, expresión con la cual califico Manuel A. Fermin, columnista del periódico Hoy, el desorden imperante en la administración del Estado dominicano, en un articulo donde enfocaba la pobre gerencia del equipo económico del gobierno y el propio presidente. * periódico Hoy del 11 de Enero del 2003.
En efecto, así ocurría. La improvisación, la ineptitud, la incapacidad, la brutalidad, la falta de experiencia en los asuntos del Estado muy pronto tuvieron como resultado un sin numero de fallos y errores, tales como redacción inadecuada de decretos, la adopción de medidas impopulares que luego tenían que revocarse y la elaboración de leyes sin la debida ponderación, que luego tenían que ser modificadas, entre otros asuntos.
Una de esas primeras medidas disparatadas lo fue el DECRETO NO. 820, del 25 de septiembre del 2000, donde el jumento de gurabo, ordenaba atrasar una hora el reloj. Un mes después se emitió otro decreto, esta vez para que se le adelantara una hora, y finalmente otro decreto para dejar las medidas sin efecto y volver a la hora original ( se gobierna un estado de esa manera, con ese desorden descomunal)
Antes de de derogarse la medida, y debido a la confusión causada y los perjuicios que ocasiono a la población, sobre todo a los trabajadores y los estudiantes, el Poder Ejecutivo, como si se tratara de un asunto de gran envergadura, designo una comisión de alto nivel integrada por la vicepresidente de la República, el consultor jurídico de la presidencia, el secretario de Estado de Trabajo y el secretario de Turismo para que determinaran que hacer. La comisión recomendó que la dejaran sin efecto, pero a partir de ahí los chistes de la gente del pueblo acerca de la incapacidad evidente del ciudadano que habían escogido como gobernante, no tuvieron limites, así quieren volver muchos dominicanos y dominicanas que no tienen un ápice de sustancia gris por no decir cerebro a que este senor y taimado caimán vuelva a gobernarnos, como masas borreguiles que somos.
Mientras estas tonterías y disparatadas sucedían las " Bases del Partido" se abalanzaron sobre la administración publica, como cabras monteras al desfiladero, Todo demandaban un empleo, sin importar el nivel cultura, ni siquiera su nivel académico, sacaban a los empleados públicos de las oficinas del estado dominicano, es decir de volver a tener este gobierno, que se preparen los empleados públicos que es pa fuera que van....
En poco tiempo los logros mostrado del gobierno anterior de adecentar y hacer mas eficiente y moderna la administración publica se fueron a pique, restableciéndose la " " ARRABALIZACION" y la incapacidad, las obscenidades administrativas en las oficinas publicas funcionando siempre una mafia afuera, para diligenciar cualquier diligencia ciudadana.
El presidente Hipolito Mejía, arrastrado por la aberración de su clientelismo y un populismo crónicos, permitió que se " CUALQUIERIZARA" en poco tiempo todo el tren administrativo del estado, y no se salvo ni el propio Palacio Nacional, el cual saquearon a mansalva y despiadada mente, al entregarlo al presidente Fernandez, pues la falta de criterios para escoger a los servidores públicos hubo de todo, chusmas, burros, burrajos, burralengos, jumentos, jumentas, borricos, borricas y alcaldes pedáneos, rufianes, malandrines....
Tomado la mayor parte del libro
" ATÍPICO" del Lic. Ramon Puello Baez
pagina 105 y 106....
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